Noche de calor de agosto
en una vida profanada
por el calor de dormir solo
y soñar a puerta cerrada.
Y, esa misma noche,
llamando a mi ventana,
la fría mano del recuerdo
empapada de madrugada.
Una mirada, un portazo,
un silencio y un adiós...
Una copa, y luego otra...
y ahogué mi voz.
Y no es la voz,
sino el sentido
de crecer a sobresaltos
sin estar arrepentido.
Con la luz de media noche
llamando a mi ventana,
te encontré a lomos
de tus suelas desgastadas.
Con la luna de cerámica
tatuada en tus ojos,
derramaste mil lágrimas
y recogiste tus despojos.
¿Qué más quisiera yo,
estrella fugaz al viento,
perdonar oir tu voz,
que olvidé hace tiempo?
De camino aprendiste
como de piedras tropezaste,
y el daño que me hiciste...
eso me ayudó a olvidarte.
Pues no hay desdicha,
ni dolor, ni castigo
que me haga olvidar
que tengo futuro, no un destino.
Y, quizá, yo nunca vuelva,
pues tú lo hiciste tarde.
Me basta con que me recuerdes,
con lo mucho que te amargue.
¿Qué más quisiera yo
que, en plena madrugada,
vieras que fuiste Sol
para este (yo) lucero del alba?
2 comentarios:
creo qhe pillado de que va bastante bien, a ver si bloger no me deja el comentario sin subir q es la tercera vez qlo subo y me esta tocando las narices..
ya me gustaria a mi saber rimar, pero soy incapaz qle vamos a hacer, a ti se te da de lujo en cambio
bessos
MMM...con la luz de media tarde llamando a mi ventana???
suelas desgastadas???
MMM...tengo una canción que dice algo así...jejeje (por cierto la tengo grabada hace bastante y nunca te la mandé)
Bueno, un poco flojeras comparado con el nivelazo que sueles demostrar... es lo que pasa cuando hace tanto que no escribes y no nos regalas la vista con tus famosas rimas, que no estás entrenado!!! (ya sabes...a escribir todos los días jajajaja, a ver si así te engaño)
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