sábado, 14 de mayo de 2005

Alerta

México, DF., a 8 de abril de 1996 Sr. Jorge Madrazo Cuellar Presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos Presente

Nos dirigimos a Ud. para manifestar nuestra indignación por los hechos ocurridos el pasado 2 de abril, cuando fue secuestrad, violada y asesinada la niña MIRIAM NANCY MACARENO DOMÍNGUEZ de 8 años de edad. Los hechos ocurrieron a una cuadra del domicilio de la niña, ubicado en la Calle Cedros, Manzana 1, Lote 8 de la Colonia Zacatenco.

La madre de la hoy occisa, Ma. del Socorro Domínguez, envió a su hija a la tiendita de la esquina a las 13:30 Hrs. y cuando pasó una hora y la niña no regresaba salió a buscarla; los niños del barrio le dijeron que el Sr. Gonzalo que vive en la misma cuadra, CON DOMICILIO EN LA CALLE CEDRO MANZANA 1, LOTE 9, COL. ZACATENCO, la había metido a su casa y ahí estaba. La madre se dirigió a la casa de Gonzalo a las 15:00 Hrs. y le pidio le entregara a su niña, el negó que la tuviera y no la dejo pasar. La madre fue por su hijo y regreso a la casa de Gonzalo quien sólo les permitió ver un cuarto y no les permitió registrar la casa.

La madre se dirigió a la Delegación Tláhuac a pedir ayuda para que se registrara la casa de Gonzalo; de la Delegación la enviaron a CAPEA, para que ahí denunciara los hechos porque le dijeron que ese era el lugar donde tenía que hacerlo. La madre se dirige a CAPEA y mientras ella estaba en CAPEA su cuñada Esther Macareno Flores y otros familiares se dan cuenta que hay dos patrullas afuera de la casa de Gonzalo que había enviado la Delegación Tláhuac. Los familiares piden a las patrullas a las 21:00 Hrs. del mismo día dos de abril que revisen la casa; ellos entran a la casa pero no pueden revisarla porque hay dos cuartos con llave de los que dice Gonzalo no tener llaves porque son de unos inquilinos de él y tendrán que esperar a que lleguen. La patrulla se va del lugar porque dicen no poder estar esperando a que lleguen. Regresan las patrullas a las 22:30 y el padre de Gonzalo que hasta ese momento se hizo presente le pide a su hijo Gonzalo que abra los cuartos. La madre de la niña dice que aún cuando se abren los cuartos no se hace una revisión a fondo del lugar y las patrullas abandonan el lugar.

La madre, Socorro Domínguez, acompañada de otros familiares regresan a CAPEA a ls 12:30 y salen de ese lugar a las 5:00 a.m. del día 3 de abril sin ninguna noticia de su hija; la familia de la niña, padres, tíos, sobrinos y amigos se organizan y pegan volantes por toda la zona con la esperanza de recuperar a la niña. El día jueves 4 de abril, las tías de la niña, Esther Macareno y Alejandra Domínguez se encontraban en la CAPEA a las 10:00 a.m., cuando fueron notificadas que una niña había sido encontrada muerta en la colonia Vicente Guerrero y coincidía con las señas que ellas habían dado, por lo que les pidieron que fueran a la Delegación Vicente Guerrero a identificar el cuerpo y efectivamente reconocieron que era su sobrina.

La niña fue encontrada desnuda, violada y muerta en esa colonia y se aprehende a GONZALO JIMENEZ PEREZ el día 4 de abril, quien no acepta ser el responsable de los hechos ocurridos. El jueves 4 la policía lleva una orden de cateo y en esta ocasión se revisa el lugar a profundidad y se encuentran, por parte de la policía, los zapatos y las pantaletas de la niña. El día viernes regresan los judiciales y encuentran una sábana manchada de sangre, así como la ropa del Sr. GONZALO JIMENEZ PEREZ.

Por los hechos que anteriormente describimos le pedimos que se investigue lo que sucedió con la intervención policíaca antes del asesinato de la niña y pedimos que el proceso penal que se ha iniciado se apegue a derecho y se castigue a GONZALO JIMENEZ PEREZ con la máxima pena que existe en delitos como el que él ha cometido.

Son hechos que indignan a toda la sociedad y las organizaciones sociales que luchamos por una vida justa, equitativa y democrática para todos, exigimos que cese la violencia y abusos que se cometen principalmente con las mujeres. Queremos un país donde podamos vivir sin violencia, para nosotras y para nuestros hijos e hijas.

Esperamos y agradecemos anticipadamente la atención que Ud. se sirva prestar a este caso.


Cosas como ésta son las que nos podemos encontrar si buscamos nuestro nombre en el Google. Otros no tienen tanta suerte...

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